DECRETO 68 /2007, de 29 DE mayo de 2007, POR EL QUE SE ESTABLECE Y ORDENA EL CURRÍCULO DE LA EDUCACIÓN PRIMARIA EN LA COMUNIDAD AUTÓNOMA DE CASTILLA-LA MANCHA.
Educación para la ciudadanía y los derechos humanos
Objetivos de Etapa
La Educación para la ciudadanía y los derechos humanos en esta etapa tendrá como objetivo el desarrollo de las siguientes capacidades:
1 Desarrollar la autoestima, la afectividad y la autonomía personal y utilizar habilidades emocionales, comunicativas y sociales con uno mismo y en las relaciones con los demás demostrando actitudes generosas y constructivas.
2 Conocer y apreciar los valores y normas de convivencia y aprender a obrar de acuerdo con ellas.
3 Reconocer la diversidad como enriquecedora de la convivencia, evitar los estereotipos y prejuicios y mostrar respeto por las costumbres y modos de vida de personas y poblaciones distintas a la propia.
4 Conocer, asumir y valorar los principales derechos y obligaciones que se derivan de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, de la Convención sobre los Derechos del Niño, de la Constitución española y del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha.
5 Conocer los mecanismos fundamentales de funcionamiento de las sociedades democráticas, y valorar el papel de las administraciones en la garantía de los servicios públicos y la obligación de los ciudadanos de contribuir a su mantenimiento y cumplir sus obligaciones cívicas.
6 Identificar y rechazar situaciones de injusticia y de discriminación, mostrar sensibilidad por las necesidades de las personas y grupos más desfavorecidos y desarrollar comportamientos solidarios y contrarios a la violencia.
7 Tomar conciencia de la situación del medio ambiente y desarrollar actitudes de responsabilidad en el cuidado del entorno próximo.
1. Argumentar y defender las propias opiniones; escuchar y valorar críticamente las opiniones de los demás, mostrando una actitud de respeto a las personas; y valorar las consecuencias de las propias acciones y responsabilizarse de las mismas.
Por medio de este criterio se valora la competencia emocional y social que demuestra el alumnado en las relaciones cotidianas; el conocimiento de sus características propias; la autorregulación de sus emociones y sentimientos; la tolerancia del fracaso y la asunción sin presunción del éxito; la empatía con los sentimientos y emociones de las personas que le rodean manifestando interés por su problemática. Asimismo si se responsabiliza de sus actuaciones y adopta actitudes constructivas y respetuosas ante las conductas de los demás (objetivo 1).
2. Aceptar y practicar las normas de convivencia. Participar en la toma de decisiones del grupo, utilizando el diálogo para favorecer los acuerdos y asumiendo sus obligaciones.
Este criterio valorará la competencia social adquirida en la participación responsable en las tareas del grupo; el respeto por las normas de convivencia; el uso del diálogo y el respeto para superar divergencias y establecer acuerdos; el voluntariado en los equipo de mediación; la colaboración del mediador en las situaciones de conflicto en las que se vea inmerso (objetivo 2).
3. Mostrar respeto por las diferencias y características personales propias y de sus compañeros y compañeras.
A través de este criterio se valora la competencia emocional y social de respeto por todas las personas y los grupos que manifiesta a través de su lenguaje y en sus actos independientemente de la edad, sexo, raza, opiniones, formación cultural y creencias (objetivo 3).
4. Conocer algunos de los derechos y deberes humanos recogidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la Convención sobre los Derechos del Niño, los principios de convivencia que recoge la Constitución española y los propios de su centro y aula.
Este criterio valora la competencia social y ciudadana demostrada en la descripción desde su práctica de los derechos y deberes recogidos en las declaraciones y normas universales y nacionales y de Castilla-La Mancha, de forma que reconozca su carácter universal y su importancia como pilar básico de la convivencia. Naturalmente, no se trata de que reproduzcan el texto de ninguna norma, sino de que sepan explicar algunos de los derechos y deberes más significativos y su contribución a una mejor convivencia (objetivo 4).
5. Explicar el papel que cumplen los servicios públicos en la vida de los ciudadanos y mostrar actitudes cívicas en aspectos relativos a la seguridad vial, a la protección civil, a la defensa al servicio de la paz y a la seguridad integral de los ciudadanos.
Este criterio valora la competencia social y ciudadana del alumnado a la hora de reconocer y explicar oralmente y por escrito, la importancia que determinados servicios públicos (educación, sanidad, abastecimiento de agua, transportes, etc.), tienen en el bienestar de los ciudadanos.
Asimismo deberá argumentar ese conocimiento con ejemplos referidos a servicios que prestan el Ayuntamiento, la Comunidad Autónoma y la Administración central del Estado y con argumentos sobre la importancia de la calidad de la gestión de estos servicios para la vida de las personas. De la misma manera, se pretende valorar si reconocen que los ciudadanos deben ofrecer su contrapartida, colaborando en el mantenimiento de las instituciones y de los servicios que éstas prestan a través de los impuestos (objetivo 5).
6. Reconocer y rechazar situaciones de discriminación, marginación e injusticia e identificar los factores sociales, económicas, de origen, de género o de cualquier otro tipo que las provocan.
Se valora la competencia del alumnado de identificar y rechazar de forma activa, situaciones injustas, tanto en su entorno como a través de la información que proporcionan los medios de comunicación. Asimismo, se valorará si identifica, poniendo ejemplos razonados, los factores que provocan las marginaciones o discriminaciones de ellas derivadas y si rechaza las consecuencias de las mismas (objetivo 6).
7. Participar de forma activa en la protección y cuidado del entorno próximo.
Se valora la competencia social y ciudadana del alumnado a través de su contribución activa a mantener el entorno cercano (casa, aula, centro, calle, parque..) limpio y cuidado; para denunciar y rechazar comportamientos agresivos con el medio; y para participar, como miembro de la colectividad, en la respuesta activa a situaciones de riesgo y catástrofe (objetivo 7).
Educación para la ciudadanía y los derechos humanos
Objetivos de Etapa
La Educación para la ciudadanía y los derechos humanos en esta etapa tendrá como objetivo el desarrollo de las siguientes capacidades:
1 Desarrollar la autoestima, la afectividad y la autonomía personal y utilizar habilidades emocionales, comunicativas y sociales con uno mismo y en las relaciones con los demás demostrando actitudes generosas y constructivas.
2 Conocer y apreciar los valores y normas de convivencia y aprender a obrar de acuerdo con ellas.
3 Reconocer la diversidad como enriquecedora de la convivencia, evitar los estereotipos y prejuicios y mostrar respeto por las costumbres y modos de vida de personas y poblaciones distintas a la propia.
4 Conocer, asumir y valorar los principales derechos y obligaciones que se derivan de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, de la Convención sobre los Derechos del Niño, de la Constitución española y del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha.
5 Conocer los mecanismos fundamentales de funcionamiento de las sociedades democráticas, y valorar el papel de las administraciones en la garantía de los servicios públicos y la obligación de los ciudadanos de contribuir a su mantenimiento y cumplir sus obligaciones cívicas.
6 Identificar y rechazar situaciones de injusticia y de discriminación, mostrar sensibilidad por las necesidades de las personas y grupos más desfavorecidos y desarrollar comportamientos solidarios y contrarios a la violencia.
7 Tomar conciencia de la situación del medio ambiente y desarrollar actitudes de responsabilidad en el cuidado del entorno próximo.
1. Argumentar y defender las propias opiniones; escuchar y valorar críticamente las opiniones de los demás, mostrando una actitud de respeto a las personas; y valorar las consecuencias de las propias acciones y responsabilizarse de las mismas.
Por medio de este criterio se valora la competencia emocional y social que demuestra el alumnado en las relaciones cotidianas; el conocimiento de sus características propias; la autorregulación de sus emociones y sentimientos; la tolerancia del fracaso y la asunción sin presunción del éxito; la empatía con los sentimientos y emociones de las personas que le rodean manifestando interés por su problemática. Asimismo si se responsabiliza de sus actuaciones y adopta actitudes constructivas y respetuosas ante las conductas de los demás (objetivo 1).
2. Aceptar y practicar las normas de convivencia. Participar en la toma de decisiones del grupo, utilizando el diálogo para favorecer los acuerdos y asumiendo sus obligaciones.
Este criterio valorará la competencia social adquirida en la participación responsable en las tareas del grupo; el respeto por las normas de convivencia; el uso del diálogo y el respeto para superar divergencias y establecer acuerdos; el voluntariado en los equipo de mediación; la colaboración del mediador en las situaciones de conflicto en las que se vea inmerso (objetivo 2).
3. Mostrar respeto por las diferencias y características personales propias y de sus compañeros y compañeras.
A través de este criterio se valora la competencia emocional y social de respeto por todas las personas y los grupos que manifiesta a través de su lenguaje y en sus actos independientemente de la edad, sexo, raza, opiniones, formación cultural y creencias (objetivo 3).
4. Conocer algunos de los derechos y deberes humanos recogidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la Convención sobre los Derechos del Niño, los principios de convivencia que recoge la Constitución española y los propios de su centro y aula.
Este criterio valora la competencia social y ciudadana demostrada en la descripción desde su práctica de los derechos y deberes recogidos en las declaraciones y normas universales y nacionales y de Castilla-La Mancha, de forma que reconozca su carácter universal y su importancia como pilar básico de la convivencia. Naturalmente, no se trata de que reproduzcan el texto de ninguna norma, sino de que sepan explicar algunos de los derechos y deberes más significativos y su contribución a una mejor convivencia (objetivo 4).
5. Explicar el papel que cumplen los servicios públicos en la vida de los ciudadanos y mostrar actitudes cívicas en aspectos relativos a la seguridad vial, a la protección civil, a la defensa al servicio de la paz y a la seguridad integral de los ciudadanos.
Este criterio valora la competencia social y ciudadana del alumnado a la hora de reconocer y explicar oralmente y por escrito, la importancia que determinados servicios públicos (educación, sanidad, abastecimiento de agua, transportes, etc.), tienen en el bienestar de los ciudadanos.
Asimismo deberá argumentar ese conocimiento con ejemplos referidos a servicios que prestan el Ayuntamiento, la Comunidad Autónoma y la Administración central del Estado y con argumentos sobre la importancia de la calidad de la gestión de estos servicios para la vida de las personas. De la misma manera, se pretende valorar si reconocen que los ciudadanos deben ofrecer su contrapartida, colaborando en el mantenimiento de las instituciones y de los servicios que éstas prestan a través de los impuestos (objetivo 5).
6. Reconocer y rechazar situaciones de discriminación, marginación e injusticia e identificar los factores sociales, económicas, de origen, de género o de cualquier otro tipo que las provocan.
Se valora la competencia del alumnado de identificar y rechazar de forma activa, situaciones injustas, tanto en su entorno como a través de la información que proporcionan los medios de comunicación. Asimismo, se valorará si identifica, poniendo ejemplos razonados, los factores que provocan las marginaciones o discriminaciones de ellas derivadas y si rechaza las consecuencias de las mismas (objetivo 6).
7. Participar de forma activa en la protección y cuidado del entorno próximo.
Se valora la competencia social y ciudadana del alumnado a través de su contribución activa a mantener el entorno cercano (casa, aula, centro, calle, parque..) limpio y cuidado; para denunciar y rechazar comportamientos agresivos con el medio; y para participar, como miembro de la colectividad, en la respuesta activa a situaciones de riesgo y catástrofe (objetivo 7).
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